Cuando emprendes con tus propios recursos tanto económicos como de tiempo y lo haces con toda la ilusión, emprender duele y duele mucho. No es un dolor físico, sino de esos que te causan tristeza, angustia y preocupación, porque quisieras que todo fuera bien. 🥺
Sé que todos los emprendimientos son diferentes, se viven y duelen distinto, pero creo que el dolor es parte del proceso y un motivador para seguir adelante. 💪
Pienso que es un punto muy importante a tener en cuenta y que si alguien que quiere emprender te pregunta qué es lo que se va a encontrar al hacerlo, tenemos la obligación moral de decirle lo siguiente:
👉 Emprender duele, no es idílico.
👉 Cuando ocurran cosas que te duelan no te rindas, sigue adelante.
👉 Cuando te duela tu emprendimiento, vive tu duelo, no te lo tragues.
👉 El dolor es necesario para aprender y avanzar.
👉 Si te duele tu emprendimiento, es que vas bien.
👉 Habrá muchos momentos de dolor en la primera etapa de tu emprendimiento.
👉 El nivel de dolor de tu emprendimiento depende de lo mucho que te importe.
👉 No tiene nada de malo sentir dolor.
Para mi emprendimiento, he pasado por muchos sentimientos, como buena mujer emprendedora social, no he parado y seguiré adelante hasta que por fin este consolidado y pueda ayudar a muchos pequeños productores con FinorBox.
Conoce a algunos de nuestros pequeños productores, a los que sin ellos no sería posible nuestro emprendimiento y no estaría tan preocupada por ayudarlos, son nuestros tesoros.